¿CÓMO LA LEGIONELLA PUEDE PERJUDICAR EL NEGOCIO Y LA IMAGEN DE UNA EMPRESA?

20 Noviembre, 2025

Mientras que muchas empresas se centran en el rendimiento financiero, la ciberseguridad o la captación de clientes, pasan por alto el peligro de la Legionella en sus instalaciones de agua.
 
Los brotes y casos de la enfermedad del legionario tienen su origen en sistemas de agua mal mantenidos, como torres de refrigeración, spas o redes de agua potable. Cuando surge la Legionella, los perjuicios se extienden mucho más allá de la salud pública, afectando a la marca, a la economía y a su prestigio y credibilidad.
 
Hay tres formas principales en que la enfermedad del legionario perjudica a las empresas y establecimientos: 
 
1. Consecuencias legales y financieras.
 
Un brote de enfermedad del legionario vinculado a una empresa puede tener graves repercusiones. La legislación española con el Teal Decreto 487/2022 establece que las personas físicas o jurídicas titulares de las instalaciones son las responsables del cumplimiento de lo dispuesto en este real decreto. En el caso de que la instalación sea explotada por otra persona física o jurídica distinta de la propietaria, esta será la responsable a efectos del cumplimiento de las responsabilidades y obligaciones del presente real decreto, salvo que pueda acreditarse fehacientemente que dicha responsabilidad la tiene la persona propietaria. 
 
Por ello, si no se cumplen las normas se podría enfrentar a:
 
·      Juicios y multas: Las empresas que no cumple la legislación de prevención de Legionella pueden ser multadas con cientos de miles de euros e incluso, en los casos graves o mortales, los directores de la empresa pueden incluso enfrentarse a responsabilidades penales.
 
·      Demandas civiles: Las víctimas o sus familias pueden presentar reclamaciones por negligencia u homicidio involuntario, lo que lleva a costosos acuerdos y problemas financieros.
 
·      Cierres: Las autoridades sanitarias pueden ordenar cierres temporales o permanentes de las instalaciones afectadas hasta que se resuelva el problema.

2. Pérdida de confianza del cliente y de la reputación de la marca.
 
La reputación es uno de sus activos comerciales más valiosos pues se necesitan años para construir, pero solo momentos para destruirla. Las noticias de un brote de enfermedad del legionario se difunden con rapidez, especialmente a través de la cobertura de los medios locales y las redes sociales. Para negocios como hoteles, parques temáticos, centros de ocio, residencias de ancianos u hospitales, el impacto puede ser catastrófico.
 
La publicidad negativa daña rápidamente la percepción pública y socava la confianza en la marca. Como resultado, las cancelaciones de los clientes tienden a aumentar a medida que las personas recurren a los competidores que se perciben como más seguros y fiables. Al mismo tiempo, atraer nuevos clientes o residentes se vuelve cada vez más difícil, particularmente en sectores donde las normas de higiene, seguridad y salud son críticas.
 
Muchas organizaciones luchan por reconstruir la confianza pública y a menudo encuentran que deben invertir mucho en marketing, cambio de marca y comunicación transparente.
 
En resumen, una vez que los clientes asocian una empresa, sobre todo del sector turístico, con malos estándares de seguridad, restaurar su confianza se convierte en una batalla difícil que requiere tiempo, esfuerzo y muchos recursos.


3. Efectos sobre el personal
 
Un brote de legionellosis no solo afecta a los clientes puede afectar a toda la plantilla. Los empleados pueden sentirse inseguros o con miedo al volver al trabajo, al conocer que los compañeros o clientes hayan contraído la enfermedad y puede generar:
 
·      Aumento del absentismo debido al miedo o a la enfermedad.
 
·      Reducción de la productividad a medida que disminuye la moral del personal.
 
·      Mayor rotación, particularmente en las industrias de servicios, donde las interacciones del personal con el público son frecuentes.
 
·      Cambios de estrategia empresarial, al dedicar el tiempo y los recursos necesarios para gestionar las investigaciones, colaborar con las autoridades sanitarias e implementar acciones correctivas se puede desviar la atención de las actividades comerciales principales, causando problemas y disfunciones en las pautas de trabajo.

La prevención es la clave.
 
La enfermedad del legionario es en gran medida prevenible a través de una gestión proactiva de la seguridad en las instalaciones del agua. Para ello, hay que:
 
·      Cumplir con las normales legales.
 
·      Realizar evaluaciones periódicas de riesgo de Legionella por una empresa o un especialista cualificado.
 
·      Implementar un plan de frente a Legionella con controles fisicoquímicos, mantenimiento del sistema y controles analíticos.
 
·      Formar al personal para que los empleados entiendan su papel en la prevención del crecimiento de Legionella.
 
·      Mantener los registros necesarios para demostrar el cumplimiento de las normas de salud y seguridad.
 
 
Ignorar los riesgos de la enfermedad del legionario es un peligro que ninguna empresa puede permitirse. Los costos legales, financieros y de reputación, pueden superar con creces la inversión en prevención y cumplimiento de las normas. 
 
Al tomar medidas proactivas se demuestra que se valora la salud, la seguridad y la responsabilidad, cualidades que fortalecen la marca y crean confianza a largo plazo entre los clientes.
 
MICROSERVICES dispone de los profesionales cualificados en evaluación de riesgos de Legionella, disponibles en toda España para proteger las instalaciones, garantizar el cumplimiento y mantener los estándares de higiene del agua.